Los 4 problemas dentales más comunes en niños
Otra vez la batalla de todos los días con el niño, otra vez que no quiere lavarse los dientes. Aunque sea duro para él, tienes que hacerle entender que la salud bucodental es muy importante para su desarrollo, desde la dentición cuando pueden darse casos de agnesia dental, hasta el mantenimiento de los dientes definitivos. Los problemas dentales más comunes en niños afectan más allá de la propia boca y los peques experimentan múltiples cambios en ella desde la infancia hasta la adolescencia.
De hecho, muchas familias asumen que la salud dental de los bebés no requiere tantos cuidados porque los dientes son temporales, pero lo cierto es que descuidar los dientes de leche puede derivar en molestias, infecciones y hábitos incorrectos que se arrastran hasta la edad adulta. Por eso, es muy importante que seas consciente también de cómo cuidar la higiene de los dientes del bebé.
Entre los diversos problemas bucales en niños, algunos son especialmente frecuentes y es importante identificarlos a tiempo para prevenir complicaciones mayores.
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Cuáles son los problemas dentales frecuentes en niños
Durante la infancia, la boca experimenta muchos cambios. La erupción de los dientes, el desarrollo de la mandíbula y la aparición de ciertos hábitos hacen que esta etapa sea especialmente delicada para la salud bucal.
Caries en dientes de leche
Las caries son, sin duda, el problema dental más frecuente en niños. Surgen por la acumulación de placa bacteriana que, al interactuar con azúcares, produce ácidos capaces de dañar el esmalte dental. Si no se trata a tiempo, puede generar dolor, infecciones e incluso la pérdida prematura del diente de leche.
Los factores que más contribuyen a la aparición de la caries son:
- Consumo excesivo de azúcar: especialmente en golosinas, zumos y refrescos.
- Mala higiene bucodental: cepillado ineficaz o inexistente.
- Falta de revisiones periódicas: muchas caries no duelen en sus fases iniciales, por lo que pasan desapercibidas.
Golpes en los dientes
Los traumatismos son problemas dentales muy comunes en niños, sobre todo en sus primeros años de vida, especialmente cuando los niños empiezan a caminar o practican actividades físicas. Un golpe en la boca puede provocar desde una simple fisura hasta el desplazamiento o la pérdida del diente.
Las consecuencias pueden ser inmediatas o aparecer días después, por lo que es importante estar atentos a signos como el cambio de color en el diente (se va oscurenciendo progresivamente), dolor o sensibilidad al masticar e inflamación de la encía.
En todos los casos, se recomienda acudir al odontopediatra cuanto antes para valorar el alcance del daño y aplicar el tratamiento adecuado.
Diente negro en niños
Uno de los signos más alarmantes para las familias es el cambio de color en los dientes. Cuando un diente se vuelve grisáceo o negro, puede ser consecuencia de un traumatismo anterior que ha afectado la vitalidad del nervio, o bien indicar la presencia de caries avanzadas.
Un diente negro en niños no debe ignorarse. Aunque no siempre provoca dolor, suele ser un indicio de que el diente está necrosado, es decir, que ha perdido su irrigación sanguínea y está en proceso de deterioro.
El tratamiento dependerá de la causa:
- Si el cambio se debe a un golpe, puede requerirse un seguimiento o una pulpectomía.
- Si es por caries, se valorará la restauración o extracción del diente, según el caso.
Bruxismo infantil
El bruxismo es el hábito de apretar o rechinar los dientes, especialmente mientras se duerme. Aunque se asocia con adultos, también aparece en niños y puede estar relacionado con el estrés, la tensión o incluso con alteraciones en la mordida.
Los síntomas más frecuentes del bruxismo infantil son:
- Desgaste en los bordes de los dientes.
- Dolores de cabeza o de mandíbula al despertar.
- Dificultad para dormir bien.
Un diagnóstico precoz permite actuar con medidas sencillas, como férulas nocturnas, ejercicios de relajación o correcciones ortodóncicas si es necesario.
Rutina bucodental para niños
Hay que enseñar a los niños a lavarse los dientes porque una rutina diaria adecuada es el primer paso para evitar la aparición de muchos de estos problemas. Los hábitos adquiridos en la infancia suelen mantenerse durante toda la vida, por lo que es fundamental educar en el autocuidado desde edades tempranas.
Buenas prácticas para una higiene dental infantil efectiva
Estas pautas ayudan a mantener una boca sana y prevenir complicaciones:
- Cepillado tras cada comida: especialmente después del desayuno y antes de dormir.
- Uso de pasta fluorada: con la cantidad adecuada según la edad (un grano de arroz hasta los 3 años, un guisante a partir de los 3).
- Supervisión del cepillado: hasta que el niño tenga destreza suficiente (alrededor de los 7-8 años).
- Visitas regulares al odontopediatra: no solo cuando hay dolor de dientes y encías en el bebé, sino también como parte de la prevención.
Los problemas dentales más comunes en niños son más frecuentes de lo que parece, pero también fáciles de prevenir con una buena rutina, alimentación adecuada y revisiones periódicas. Prestar atención a señales como cambios de color, rechinamiento nocturno o sensibilidad dental permite actuar a tiempo y garantizar el correcto desarrollo bucodental.
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Porque cuidar la salud bucal de los niños no solo previene dolencias futuras, sino que también mejora su autoestima, facilita su aprendizaje del habla y garantiza una mejor calidad de vida. ¡Cuida los dientes del peque!
Fuentes:
Publicado el 06 May, 2025